LA ALKIMILA Somática, plantitas & com_pasión queerfeminista*
LA ALKIMILA es un espacio virtual pensado para acuerparnos a través de la pantalla.
el nombre LA ALKIMILA
se deriva de la planta Alquimila, Alchemilla vulgaris, importante compañera en mis tránsitos de la obsesión teórica a la práctica somática y las relaciones con plantas. Me guía con la com_pasión queerfeminista* que pongo en la base de LA ALKIMILA. La «pequeña alquimista» nos acompaña en todos los acuerpamientos de forma sutil, con ternura radical y desafiando las perspectivas binarias a la vida.
La Alquimila dice algo como: «te ofrezco cobijo, mi medicina funciona como una capa protectora, a que te sientas acogida, arropada, más segura. Aquí estoy para ti, siempre cuando pienses en mí.» Y algo parecido me gustaría transmitir: que, a ratos, LA ALKIMILA se convierta en ese abrigo, en un hogar compartido, en el que sentirse cómodas, en compañía humana y más-que-humana. LA ALKIMILA nace de la com_pasión queerfeminista*, con la que seguiremos acuerpándonos a través de la pantalla. — LEER MÁS —
Las propuestas EN GRUPO, 1:1 & AUTOGUIADOS ponen énfasis en la presencia online y juegan con los usos y experiencia de las tecnologías digitales. Cuerpos & palabras, plantas & imágenes se vuelven herramientas y cómplices para los acuerpamientos de FEMI*SPA, HERBOLARIA EXPERIENCIAL y GINEDUCACIÓN NO BINARIA.
Impotante: LA ALKIMILA no es un espacio de terapia y –haciendo caso a las estrictas regulaciones alemanas– no soy ni terapeuta, ni naturópata, ni herborista (clínica) de profesión. Con compromiso, com_pasión y respons-habilidad trabajo desde los oficios de la tallerista, la consejera, la compañera, la hierbatera popular.
yo soy steffi
Aquí me ves a través de la pantalla, perspectiva desde la que me verás en los encuentros, talleres y acompañamientos 1:1 (aunque no siempre con gorrito y escobas, que son parte del escenario del taller Marujas, Exquisitas & Feministas).
Incluso antes de nacer me diagnosticaron «mujer», traje que durante mucho tiempo me quedaba grande, mientras ahora me aprieta. No me molesta el pronombre «ella», mientras incluya que la experiencia binaria no me atraviesa: es ella de persona. Nací en 1982, en la ciudad de Hamburgo, en el norte de Alemania. Con 20 años tomé la mejor decisión de mi vida: me fui a vivir a Granafa. Por más de una década hice mi vida entre los montes granainos y (la periferia de) Barcelona. Desde hace unos años estoy de vuelta en mi puerto de origen, vegetando en una cueva urbana desde la que me conecto contigo para los acuerpamientos de LA ALKIMILA.
Nunca me han gustado los CV, ni soy lo que estudié. Trabajé de muchas cosas y tengo una formación académica en Sociología, un Máster en Gender Studies y estudios en diferentes ámbitos de la fotografía. Tengo más de 10 años de experiencia en enseñar temas de género, anti-racismo, diversidad funcional desde la fotografía y las metodologías visuales. Luego se juntaron la Somática y las plantitas…
En 2017, un burnout y la agravación de mis condiciones crónicas-traumáticas me llevaron a un lugar absurdo con respecto a mis formas de producir y compartir conocimientos: sabía decir mucho en torno a la construcción social y visual de los cuerpos, mientras no tenía ni idea de cómo funcionan y en qué consiste su materia. Me causó dolor y mucha risa que se hablese tanto de embodiment cuando ese cuerpo teórico carecía de órganos, músculos, nervios, hormonas…, los «conocimientos del cuerpo» no incluían las ciencias de la vida, y yo ya no tenía conciencia corporal ninguna.
por necesidad y con mucha curiosidad
cojeé al mundo de la Somática para formarme y transformar, en compañía de las plantas. Desde la cama y en aulas/consultas, estudié distintos ámbitos de la naturopatía relacionados con la ginecología/endocrinología; estrés, burnout y trauma; pedagogías somáticas y de relajación; masaje; herbolarias tradicionales y modernas… Voy a terapia respiratoria y Somatic Experiencing®, soy alumna de la técnica Alexander y sigo des_aprendiendo continuamente con personas y proyectos de distintos lugares del mundo, que ponen énfasis en politizar las prácticas de bienestar, ginecología y herbolaria con miradas tullidas, decoloniales, no binarias y animistas.
Personalmente, encuentro sosiego en LA ALKIMILA, un lugar en el mundo y en mi cuerpo que me permite des_conectar, crear espaciotiempos acogedores, ofrecer talleres y acompañamientos desde la (necesaria) distancia. Lo que algún día se pensó como una consulta de naturopatía, se ha convertido en algo mucho más divertido y colectivo: una propuesta abierta a devenir otra cosa con y para cada persona. En LA ALKIMILA traspasamos espacios, tiempos y las líneas divisorias entre quién aprende y quién enseña, entre quién busca acompañamiento y quién acompaña. Siento que es una parada importante en la que me gustaría re_crear de aquí en adelante, haciendo mutar sus formas y contenidos junto a vosotras**, mientras nos acuerpamos a través de la pantalla.
** Suelo escribir y hablar en la forma con «a» (las, ellas, nosotras…) porque hablo de y con personas (humanas y más-que-humanas)... hasta que alguien me pida otra cosa.
Desde Guatemala, Lorena Cabnal explica:
«nombro como acuerpamiento o acuerpar a la acción personal y colectiva de nuestros cuerpos indignados ante las injusticias que viven otros cuerpos. Que se auto-convocan para proveerse de energía política para resistir y actuar contra las múltiples opresiones patriarcales, colonialistas, racistas y capitalistas. El acuerpamiento genera energías afectivas y espirituales y rompe las fronteras & el tiempo impuesto. Nos provee cercanía, indignación colectiva pero también revitalización y nuevas fuerzas, para recuperar la alegría sin perder la indignación.«
presencia online
El hecho de que LA ALKIMILA sea un espacio virtual no (me) quita la posibilidad ni las ganas de crear espaciotiempos acogedores, íntimos, cercanos, sentidos. Aquí, la distancia física abre espacio para estar presente y presenta la oportunidad de repensar qué entendemos por presencia(l) en primer lugar. Enfocamos la pantalla como un portal que nos conecta (más que una barrera que distancia) y experimentamos con el uso de las tecnologías digitales para des_conectar.
Aquí estamos la Alquimila, yo & LA ALKIMILA para cuando tú decidas acercarte.
